La raza Charolais la iniciamos en los años 60 con ganado traído del rancho El Canelo de Tamaulipas. En ese entonces dejábamos los mejores becerros media sangre, tres cuartos y siete octavos, como sementales para ser los padres del hato.
En 1973 se compró otro hato puro de la ganadería Caskey de Weslaco Texas. Ese hato estaba integrado por media sangre y tres cuartos franceses, pues en esa época le daban mucho valor al Charolais Francés. Ahí iniciamos un programa de encaste, y en los años 80 se compraron algunas hembras del Dr. Gonzalo González, se inspeccionaron por la Asociación y se registraron los animales media sangre y tres cuartos de acuerdo a la condición visible de los animales. Después se compró algo de ganado en Canadá y de ahí nació el hato Charolais que actualmente tenemos.
En todo este tiempo, de los 80 en adelante, se inseminaba aunque fueran media sangre o tres cuartos. Se inseminaba para dar brincos genéticos y productivos, y no irnos tan despacio, siempre buscando facilidad al parto y las tallas más chicas de la raza.
Hemos logrado un animal más rústico pues requiere de menos comida para su producción, teniendo pesos promedio al destete de 200kg a los 205 días de edad. Estos pesos son propios de la región ya que nos encontramos en una zona semidesértica en donde los promedios de precipitación anual oscilan entre los 500 y 550mm.
Las hembras seleccionadas, las desarrollamos y luego, las empadramos a la edad de 18 a 24 meses con toros Brahman para que no tengan problemas al primer parto; y ya abiertas, del segundo empadre en adelante se hace con toros Charolais (no hay asistencia al parto). El empadre es continuo todo el año; eso nos permite tener crías de todas las edades para que el cliente tenga la opción de escoger animales de cualquier edad.
Los machos seleccionados los desarrollamos, y a partir del año de edad se ofrecen en venta como toretes a los ganaderos comerciales de la región y de México.
